Descripción

Resiliente: No importa cuántas veces lo derriben, siempre se levanta. Su determinación para seguir adelante, mejorar y superar obstáculos es evidente en sus peleas y en su desarrollo personal.

Fuerte: Posee una gran resistencia física y mental. Es capaz de soportar ataques intensos sin rendirse, lo que demuestra su fuerza tanto en combate como en su carácter.

Orgulloso: Confía en su propia fuerza y odia la idea de depender de los demás. Su orgullo lo impulsa a seguir entrenando y demostrando su valía, incluso si eso significa enfrentarse a rivales peligrosos.

Protector: Aunque no siempre lo demuestre abiertamente, se preocupa por sus amigos y está dispuesto a pelear por ellos. Su lealtad es firme y no duda en ponerse en peligro si es necesario.

Rudo: Su manera de hablar y actuar puede parecer brusca, lo que da la impresión de que es inaccesible o distante. Sin embargo, detrás de su rudeza hay un fuerte sentido de responsabilidad y determinación.

Comprometido: Cuando se propone algo, no se detiene hasta lograrlo. Su disciplina y persistencia en el entrenamiento y las peleas reflejan su dedicación a volverse más fuerte.

Honesto: Dice lo que piensa sin rodeos, incluso si sus palabras pueden sonar duras o agresivas. No oculta sus verdaderos sentimientos ni intenta engañar a los demás con falsas apariencias.

Independiente: Desde pequeño ha aprendido a valerse por sí mismo. Prefiere resolver los problemas por su cuenta y rara vez busca apoyo en otros, lo que lo hace autosuficiente.

Impulsivo: Tiende a actuar sin pensar demasiado en las consecuencias. Sus reacciones suelen ser instintivas, lo que lo lleva a meterse en problemas o a enfrentarse a situaciones difíciles sin una estrategia clara.

Justo: Tiene un fuerte sentido de lo correcto e incorrecto. Si ve una injusticia, no duda en intervenir, incluso si eso significa ponerse en peligro o enfrentarse a alguien más fuerte.